18 junio 2021

Denunciamos la exclusión educativa

    

E.I. La Comba de San Sebastián de los Reyes

Los criterios para la concesión de plazas en las escuelas infantiles públicas de nuestros municipios, así como la tramitación de la solicitud, excluyen de facto a las familias en situación más vulnerable: las que no disponen de trabajo y tienen que buscarlo y las que  no tienen acceso a Internet para tramitar el papeleo.

Estas últimas semanas, voluntarias y voluntarios de la Plataforma Ciudadana Sanse- Alcobendas hemos tenido la ocasión de apoyar a algunas familias a las que acompañamos en el proceso de solicitud de escolarización de sus hijos (0-3 años) en las Escuelas Infantiles públicas el próximo curso 2021/2022.

    El primer obstáculo que encontramos fue que la solicitud tenía que presentarse online porque “así lo pedían las instrucciones de la comunidad de Madrid". Algunas de las familias a las que acompañamos no tienen dominio del idioma, no disponen de acceso a Internet o tarifa de datos suficiente para realizar estos papeleos a través de la web o son familias monoparentales sin la posibilidad de contactar con el padre. Estuvimos batallando con un programa que exigía la firma de ambos progenitores a través de códigos enviados al teléfono y una " secretaria virtual de la CAM' altamente complicada con múltiples errores y que fallaba muy a menudo.

    Conseguimos entregar las solicitudes en papel con 9 de las familias gracias a la flexibilidad de acción que permite la ley y que aplican los equipos directivos, aunque nos costó que algunos centros entendieran el maltrato burocrático que se está cometiendo en estos casos. Muchas familias y voluntarios escuchamos a menudo expresiones como "Inténtalo como todos y si no ... pues ya lo recogemos la semana que viene en papel "

    Salieron las listas provisionales con las baremaciones y hemos asesorado a las familias en la elaboración de sus alegaciones. Porque lo cierto es que los criterios de baremación se derivan de una idea básica y clásica: La escolarización en estos primeros años (0- 3) no responde al principio del derecho a la educación pública para todos los niños y niñas. Más bien es un apoyo para que los padres y las madres puedan "conciliar" el trabajo con el cuidado de los hijos. Por ello, no es obligatorio para la administración ofrecer suficientes plazas públicas, tantas como solicitudes y se da el caso de que las familias en seguimiento por servicios sociales, si trabajan y no han conseguido plaza, se les oferta pagarles una plaza en una escuela privada. Esta decisión nos parece insólita.

    Reclamamos por ello medidas inmediatas y a medio plazo para adaptar los criterios de baremación a todas las situaciones. Esto es urgente porque hemos detectado casos como: 

  • Que no den puntos a una familia por no tener trabajo (ante lo cual nos preguntamos ¿cómo se busca trabajo con un bebé a cuestas?)
  • Que no den puntos a una familia que trabaja sin papeles (por falta de regulación de residencia o por empleos en "B") porque no es posible aportar contrato o vida laboral oficial que lo certifique. Debemos recordar que estas familias están en la situación más vulnerable y los servicios públicos deberían volcarse en paliar estas situaciones. 
  • Que no den puntos a una familia si no aporta la declaración de la renta de 2019. Pero para pedir certificados a Hacienda necesitas clave pin, o cita a tiempo y sin papeles todo 

Aquí no sobra nadie

    En el año que llevamos atendiendo a familias de Sanse y Alcobendas en situación desfavorecida por la pandemia, son varias las ocasiones en que estas familias nos dicen que, al contar a Servicios Sociales de ambos Ayuntamientos las dificultades que tienen para pagar el alquiler, reciben la misma respuesta: “Es que la vivienda aquí está imposible, mejor vete a otro municipio, te irá mejor”.  

    De hecho, los propios concejales de ambos municipios calificaron, en sendas reuniones con miembros de la Plataforma, el problema de la vivienda en Sanse y Alcobendas como “imposible”.

           (Por esta casa piden 600 euros al mes)

    Justamente esa es la respuesta que recibió una de las familias que acompañamos cuando pidió ayuda para el alquiler a la trabajadora social que tiene asignada en el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes: “Dice que quiere que me busque otro sitio donde vivir  pero que sea fuera de San Sebastián de los Reyes. Dice que los pisos son muy caros aquí y que si yo me voy lejos me pueden ayudar para el alquiler, pero tiene que ser lejos de aquí y más barato”, nos contó Iris (nombre ficticio), que vive con su marido y sus cuatro hijos y lleva muchos años viviendo en nuestro municipio y ganándose la vida como cocinera y cobrando en B. 

    Servicios Sociales sabe que las familias que llaman a su puerta sufren los abusos de caseros que les exigen el pago de tres meses, les alquilan pisos en pésimo estado a precios altísimos y los acosan para que dejen las viviendas antes de que venza el contrato si no les interesa que sigan allí. El Ayuntamiento sabe todo esto, pero no hace demasiado para evitar estos abusos.

    Recordamos también con mucha indignación el caso de Verónica, una mujer con hijos pequeños con la que incluso la SAREB estaba dispuesta a negociar un alquiler razonable si el Ayuntamiento intervenía. La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH AlcoSanse) intervino para parar varios intentos de desahucio y presionó a la corporación municipal para que intercediera, pero finalmente el Ayuntamiento no quiso intervenir y la familia de Verónica, con hijos que asistían a uno de los colegios de nuestro municipio, se vio expulsada en octubre, en plena pandemia, y tuvo que buscar cobijo en casas de familiares.

«Desplegar políticas y planes que tengan en el centro la defensa de los derechos de los vecinos«

    Las personas que formamos parte de la Plataforma criticamos la actitud de la corporación municipal de “esto es lo que hay” o “sálvese quien pueda”. Las autoridades deben ser las garantes de los derechos de todos los vecinos y vecinas. Por eso denunciamos la absoluta dejación de funciones de nuestro Ayuntamiento a la hora de defender el derecho de muchos de los vecinos, especialmente golpeados por la pandemia, pero que han contribuido con su trabajo, sus familias, sus impuestos y su consumo a hacer de Sanse una ciudad mejor, a una vida digna y a su propia seguridad humana, que ahora se ve tambaleada por el paro, la falta de ingresos, los abusos de los caseros y la insuficiente respuesta de los servicios municipales a una inmensa y gravísima emergencia social.

    Frente a estos mantras de “sálvese quien pueda”, “esto es lo que hay”, “es que la vivienda está imposible”, las personas que formamos la Plataforma Ciudadana Sanse-Alcobendas reclamamos que el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes despliegue políticas y planes que tengan en el centro la defensa de los derechos de los vecinos y un concepto de seguridad humana y bienestar que beneficia a todos los habitantes del municipio. 

    Esta pandemia nos ha demostrado que no superaremos esta situación hasta que todos estemos a salvo. Y con la emergencia social y la convivencia en nuestras calles ocurre lo mismo: si no vemos todas las personas nuestros derechos protegidos, no estaremos a salvo. Y el bienestar de los vecinos y vecinas se asienta en el hecho de tener una vivienda cómoda y decente (muy lejos de los cuchitriles y pequeños zulos que alquilan caseros abusivos a precios desorbitados a muchas de las familias a las que acompañamos), en la inclusión de nuestros hijos en el cole, en la percepción de que tenemos los mismos derechos y oportunidades que el resto de los vecinos, en el sentimiento de pertenencia a la comunidad en la que se habita, en la sensación de ser tratado dignamente cuando alguien pide a las autoridades que se protejan sus derechos frente a los abusos… 

    Mal vamos si en lugar de todo esto muchos de nuestros vecinos y vecinas perciben que servicios sociales no les tratan con dignidad o les invitan a ir a otra localidad donde las viviendas sean más baratas.  

02 mayo 2021

Apoyamos a los profesionales de los servicios sociales de Sanse

Es muy frecuente que la Pandemia, con sus múltiples consecuencias, absorba gran parte de nuestras comunicaciones, de nuestros actos, emociones, ….

Después de más de un año de convivir con este virus hemos ido aceptando que todo lo que ha ido surgiendo en nuestro modo de vivir, va a dar lugar a otro modo de estar, tanto en lo individual como en lo social.

Por eso, ya se señala desde fuentes muy diversas, que es imprescindible que haya cambios significativos tanto en lo personal, como en la forma de organizar nuestra sociedad.

Bajando a los ámbitos concretos, nos encontramos con un aumento considerable de la vulnerabilidad en un alto porcentaje de los ciudadanos. Al tiempo que las desigualdades se hacen más evidentes, se eleva el n.º de personas que quedan “excluidas” por no tener empleo, vivienda,  salud, educación…

       ¿Y qué respuesta estamos dando?

Surgen organizaciones y colectivos más o menos organizados de ciudadanos que quieren compensar de algún modo estas situaciones de extremas carencias. Unos más y otros menos, piden a las administraciones públicas que den respuestas ajustadas a la nueva situación.

Y las administraciones, a través de sus Servicios Sociales, parece que no acaban de encontrar el modo de responder a tanta vulnerabilidad.

En algunos municipios y comunidades autónomas se ha aumentado algo el n.º de profesionales con contratos temporales, que están a punto de finalizar. Los profesionales organizan “videoconferencias” para analizar las situaciones de desbordamiento que están viviendo y para sugerir los cambios estructurales que tendrían que imponerse: menos burocracia y más acompañamiento real a todas las personas, familias, que sufren cada día el dolor y la falta de dignidad al no hacer otra cosa que “pedir” (citas, comida, ropa, pago de facturas, habitación …).

¿Cómo es posible que no se tomen decisiones consistentes? Los servicios públicos han de dar respuesta a todas estas carencias. ¿Dónde están políticas de empleo que puedan dar dignidad a las personas?

Es necesario que haya una decisión política, basada en los principios de justicia e igualdad, para que sea posible salir del túnel en el que cada vez parece que la luz se va perdiendo.

Sabemos lo dura que esta siendo la situación para todos los profesionales que atienden a esta población vulnerable, sabiendo que sólo pueden tramitar ayudas parciales … que atenúan como mucho las carencias unas semanas o unos meses… Agradecemos su esfuerzo diario y su apertura a la comunicación con los voluntarios de esta Plataforma.

Y en San Sebastián de los Reyes, ¿cómo el Ayuntamiento finaliza los contratos laborales de varios profesionales del departamento de Bienestar Social  cuando las necesidades no han disminuido?

¿Cómo se va a dar atención a las familias atendidas por ellos si aún con esos “contratos Covid” los tiempos de espera eran demasiado preocupantes? ¿Quién absorbe el trabajo de las que se van? Y para las familias será aumentar la dificultad el empezar con otros profesionales.

Pedimos al Gobierno municipal de San Sebastián de los Reyes que dé una respuesta contundente para fortalecer los Servicios Sociales, manteniendo todos los contratos de trabajo, creando otros nuevos y mejorando las condiciones de los profesionales que “cuidan” a las personas vulnerables.

“Si unimos la clemencia con la fuerza y la fuerza con la razón, el amor será nuestro legado, y el cambio, el patrimonio de nuestros hijos" (Amanda Gorman). 

18 abril 2021

Queremos que Sanse cuide a la infancia

Artículo de opinión para Diario de Sanse 

Este pasado jueves 15 de abril celebrábamos el Día del Niño. Por eso en esta ocasión queremos hablar de la situación de la infancia y la adolescencia, especialmente la más desfavorecida, en nuestro municipio.


Desde el principio de la pandemia, los vecinos y vecinas que nos animamos a formar la Plataforma Ciudadana Sanse-Alcobendas, al ir a repartir alimentos entre las familias en situación de emergencia social por la COVID-19, nos dimos cuenta de la situación precaria en la que vivían muchos niños y niñas y, en especial, vimos las dificultades de muchos de ellos para seguir la educación online por no disponer del equipamiento adecuado. Por eso, hemos estado en contacto con el Ayuntamiento, la Dirección de Área Territorial Norte de la Consejería de Educación, los equipos directivos de los centros educativos y las AMPAs de colegios e institutos para trasladar nuestra preocupación por el riesgo de exclusión educativa que sufren muchos menores en nuestro municipio y para mostrar nuestra disposición a contribuir a solucionar este grave problema social. La respuesta de las administraciones públicas con competencia en educación ha sido francamente insuficiente.

«Personas voluntarias de la plataforma se volcaron en ofrecer actividades lúdicas y educativas«

Además, en verano pusimos en marcha actividades de refuerzo socioeducativo al aire libre para hijos e hijas de las familias a las que atendemos. Personas voluntarias de la plataforma se volcaron en ofrecer actividades lúdicas y educativas y a favorecer durante unas horas la conciliación de la vida familiar y laboral. Al mismo tiempo, organizamos varias recogidas de ordenadores, tablets y material escolar para familias en situación de emergencia social.

Con estos equipamientos donados por personas y organizaciones, hemos podido poner en marcha desde septiembre las clases de refuerzo online que ofrecemos a niños, niñas y adolescentes con dificultades. Ahora mismo atendemos a unos 18 estudiantes, de Primaria, Secundaria y Bachillerato. Estamos en contacto estrecho con su profesorado para conocer sus necesidades, proponer soluciones conjuntas y evaluar sus progresos. A pesar de nuestros esfuerzos, valoramos que estas clases online no son suficientes, porque los chicos y chicas tienen dificultades para centrarse, carecen de un espacio adecuado, mesa y silla para trabajar y algunas familias necesitan una atención integral que no están recibiendo. Por ello, para paliar la exclusión educativa consideramos necesaria la puesta en marcha de amplios programas públicos de refuerzo escolar tanto en Primaria como en Secundaria y Bachillerato, en coordinación con el profesorado.

Alertamos de que hay un alto porcentaje de niños, niñas y adolescentes que están acumulando un gran retraso que les impide sentirse incluidos en el grupo de iguales. La inseguridad, el estrés, y la ansiedad se va instalando en ellos. En muchos va apareciendo un sentimiento hondo de «estar perdidos» de «que no valen»… Se muestra más claramente en Bachillerato. Un chico de 1° de Bachillerato nos decía: «De mi clase (más o menos 35 alumnos) solo 3 o 4 se enteran, los demás estamos perdidos. Los días que nos tocan las clases on line no puedo seguir nada. Me es imposible coger apuntes porque no se qué escribir».

«Los parques infantiles de nuestro municipio han estado muy buena parte del tiempo que llevamos de pandemia cerrados«

Es importante subrayar que menores con necesidades especiales tienen aún más problemas en seguir las clases de refuerzo online y reciben una asistencia claramente insuficiente (la ley marca un apoyo de siete horas a la semana y algunos de ellos apenas disfrutan de dos horas y media). Además, no queremos olvidarnos de los niños, niñas y adolescentes que no pueden acudir a clase por riesgo para su salud debido a los graves problemas respiratorios que sufren y que llevan casi un curso y medio sin socializar con sus iguales, lo que está teniendo un impacto devastador para su bienestar y su salud emocional.

           Los parques infantiles han estado precintados en Sanse hasta no hace mucho tiempo

Si a esto unimos el hecho de que los parques infantiles de nuestro municipio han estado muy buena parte del tiempo que llevamos de pandemia cerrados y que no existen muchos equipamientos de ocio para adolescentes (como pistas deportivas) podemos entender que la infancia y la adolescencia de nuestra ciudad han visto ciertamente cercenados sus derechos (al juego al aire libre y a la educación, principalmente).

Debemos recordar una vez más que las administraciones públicas son las encargadas de velar por el cumplimiento de estos derechos, que no pueden depender solo de la buena voluntad y la solidaridad vecinal. Los niños, niñas y adolescentes de nuestro municipio se merecen unas políticas públicas que los defiendan y cuiden.