Algunas de las familias con las que hemos contactado nos han permitido compartir su historia y dar visibilidad a la realidad que están viviendo y que representa a muchas otras anónimas. Conociendo de cerca la precariedad en la que viven, reivindicamos con más fuerza la necesidad de que los ayuntamientos de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes abran las cocinas escolares YA.
"Hasta que llegó el confinamiento, mi familia vivía como otras tantas, trabajando para dar a nuestros hijos una vida mejor que la nuestra. En marzo, a mi marido y a mí nos hicieron un ERTE en nuestro trabajo. Empezamos a cobrarlo en mayo.
Durante las primeras semanas fuimos haciendo frente a los gastos habituales (alquiler, luz, etc) hasta que nuestros escasos ahorros se acabaron. Ante la angustia de no poder dar de comer a nuestros hijos pedimos ayuda a servicios sociales, que nos citó para dos meses más tarde. Gracias a la generosidad de personas que ni siquiera conozco, estos meses he recibido una cesta de comida semanal que ha sido la esperanza y la alegría de mi familia. Hemos podido comer frutas, verduras, carne... Saber que no nos iba a faltar la comida, nos ha dado a mí marido y a mí la energía para salir adelante de esta situación y transmitírsela a nuestros tres hijos.
Mi marido ha comenzado a trabajar. Aunque nuestros ingresos siguen siendo muy escasos, tenemos esperanza de no estar solos. Pedimos que ninguna familia se vea desamparada en una situación como la que vivimos. No hay esperanza sin comida"
Firma nuestra petición para que los ayuntamientos de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes hagan frente a la #emergenciasocial
Otra familia con dos hijos, vivía al día y el único dinero que entraba en la casa procedía del trabajo de la madre como peluquera en un centro comercial. Debido al Covid-19 sufrió un ERTE que cortó de raíz los ingresos económicos pues el cobro del mismo se ha retrasado. Ahora, tienen dificultades para hacer frente al pago del alquiler y para comprar alimentos. Conocemos ya, varias familias en esta situación. Los servicios sociales están saturados, les dieron cita para junio.
Colaboramos también con una familia de nueve miembros, cuatro de ellos son niños. Todos se mantenían con el sueldo de la madre, empleada doméstica, y de pequeños trabajos precarios sin contrato que realizaban otros miembros de la familia.
A veces, los Ayuntamientos nos dicen que ya están concediendo becas de comedor y reparto de familias con RMI (Renta Mínima de Inserción) pero estamos viendo que eso no es suficiente. Exigimos a las autoridades locales un plan integral de emergencia ante la precaria situación en que viven muchas familias desde que llegó el Covid 19.
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